Romper el hielo
Como todas las veces que nos hemos encontrado,
Esta última no fue muy diferente.
El modus operandi es el mismo; como si estuviéramos
Sometidos a alguna prueba de un científico loco;
Como si alguien no tuviera que saber, lo que todos ya
sospechan.
Nos encontramos y no por casualidad, yo sabía que estarías
Ahí, pero tú si te sorprendiste. Eso no me trajo ninguna
Excitación hasta que me buscabas con los ojos entre toda
la gente primero buscabas el contacto visual y después
tratabas
de tocarme por accidente.
Recuerdo bien aquella vez que me calentaste los pies
Como un favor para más tarde poder tener permiso de pasarme
los brazos por la
cintura y tomarme las dos manos al mismo tiempo
Enredadas como si no tuviera salida.
O como el jueves, que primero te la jugaste para sentarte en el
mismo
sillón que yo, y luego, conforme corría la noche, te sentiste en
la
confianza de ponerme
la mano en la rodilla como un gesto amistoso.
O darme palmadas en la espalda como diciendo:
Ya estamos aquí otra vez ¿Ya qué?
Y luego, bailamos primero no tan cerca, luego pegados, luego
juntos.
Ya dormida fuiste y me besaste, como si no quisieras que
olvidará
tu presencia.
Cuando desperté estabas
enseguida de mi agarrándome la mano,
como si nos viéramos por
primera vez.
Y eso me gusta de nosotros, que no tenemos pasado
Firma Carol,
Tu extraña
Comentarios
Publicar un comentario