Lo que me gusta de ti

Me gustas. Y cuando digo que me gustas, quiero decir que me 

gusta todo de ti. 

Y que enumeraré ciertas cosas, para que todos sepan, que hay en ti,

que no tiene el mundo.

Me gustan las explicaciones que das, cuando no te parece lo que hay en el menú, 

lo que la gente opina, o lo que dicen en los noticieros acerca del clima, 

cuando eres tú el que está afuera y no ellos.

Me gusta como lanzas la piedra y escondes la mano, me gustan los que dices 

que son tus defectos y los que yo veo, desde otra perspectiva como defectos en ti.

Me gusta cómo le faltas al respeto a los hipócritas diciendo lo que piensas sin

 reparos de recibir una golpiza, porque tú eres así, un cómplice de la verdad.

Me gusta que seas tan optimista incluso en los peores momentos, porque yo 

no lo soy, y así es como se va equilibrando el PH de nuestras vidas.

Me gusta cuando no te reservas cuando dices qué amas y que no, porque 

quién no te ama, te ama por eso, y quién te ama, te amará más.

Me gusta las combinaciones que haces cuando vas a el súper, pero me gusta 

más como logras una fiesta con un plato de comida, o como logras una 

pancarta que grita ‘Me quedaría contigo hasta la muerte’ con un solo apretón.

Las lenguas que envenenan están por todos lados, pero tu lengua envenena 

de vida y energía, que una gota de tu saliva podría curar a un ejército caído.

Me gusta como haces música con los pies, incluso sin ser una mujer que usa 

tacones y avisa su presencia, tú haces tuya la calle, con tan solo pisar.

Me gusta cómo lees lo que escribo, y que digas que te metes en mis historias y se te enchina la piel, incluso cuando lo que escribo puede ser más melancólico

que un aniversario fatal.

Y si fueras otra persona me gustarías, pero lo bueno es que eres tú 

y por eso me gustas más.

Firma Carol,

Ni gitana ni Angel