Es mi novio pero él todavía no lo sabe

Yo, que recuerdo todos mis sueños cuando despierto, no me imagino como son las mañanas de las personas que dicen que no sueñan, o peor: que no lo logran recordar. Tengo una vida alterna por las noches, cuando de pronto me encuentro en un escenario que nada tiene que ver con mi vida habitual, cuando estoy con personas que jamás lograría reunirlas en un solo lugar, cuando sueño que soy otra, con otros gustos y otras habilidades.      Y una de mis cualidades número uno, es que mis sueños me impresionan tanto que cuando despierto ya estoy obsesionada con ellos. En un catálogo de cosméticos, hace poco vi en la portada a un modelo guapísimo que tenía el pelo cubierto de canas. Su rostro no correspondía a la edad de su cabello y al aire, hice un comentario de que eso me gustaba bastante. Cuál es mi suerte, que mi inconsciente me hizo soñar que un cliente que tengo, con esas mismas características: era mi novio. Mi primera observación al despertar fue que jamás me había dado cuenta de que ese hombre era realmente atractivo a pesar de su edad. Mi segunda observación fue que su esposa que es realmente guapa, ya no me parece que le haga justicia como antes de que hubiera soñado que era mi novio. Y mi tercera conclusión fue, que ojala fuera mi novio en la vida real. Bastaba un sueño para que me diera cuenta que está más rico que el clima lluvioso, que tiene un rostro maravilloso y que seguramente hay más de una por ahí, que sueña que es también su novio. Hoy que lo volví a ver, y que nos sonreímos como si compartiéramos la complicidad de mi sueño, tuve tantas ganas de decirle: Se va a reir cuando le diga, que anoche soñé que era mi novio, señor. 

Yo siempre estoy a un paso, de obsesionarme de muerte con los sueños,

Firma Carol