Aúllas


        Siempre me quedo con ganas de decir algo. Algún suceso u otro tema nos distrae y yo me quedo con las palabras a media boca. A veces las absorbo como un spaggetti y las devuelvo a mi interior o las digo en voz baja como si estuvieras oculto detrás de algún mueble.
Siempre me quedo con la sensación de que mis ojos no te han visto lo suficiente. Mi cabeza se obsesiona con la falta de precisión con la que mi memoria te guarda. A veces tu lunar de la mejilla izquierda se mueve de lugar unos grados cuando te sueño, cuando te imagino haciendo alguna tarea doméstica, cuando estoy a punto de hablar de ti. Tengo la constante sensación de que tengo que tocarte para grabarme mejor lo que eres.
        Siempre me quedo con la tentación de un último roce, una última caricia. Me giró antes de ver que te vas y tú me observas la espalda. Entonces cuando yo tengo algo que decirte, por ejemplo que anoche soñé que te rompías un brazo, tú me interrumpes para comentar la forma –sabrosa- en que camino y aúllas igual que un lobo y yo me rió, y reírnos los dos es mejor siempre de lo que voy a decir.
Olvido las palabras y las caricias las conservo para el próximo encuentro. Los eventos se salen de control, gracias a ti, al clima o las prisas. Nuevas posibles caricias surgen y las otras se rezagan hasta que junto a mi hay un montón de cariños inconclusos que veo de reojo.
         Siempre me quedo con pedazos de nuestra historia que tú no sabes que existen. Acordono unos con otros y espero a que hagas alguna observación importante sobre nosotros para unirlos a la historia, para atar tanto cabo suelto.
          Sí esto no nos pasa yo me aferraré a los momentos hasta que mi nostalgia los confunda con otros y disuelva la terrible sensación del vacío. Armaré la historia como un rompecabezas de piezas infinitas hasta que comience a inventar un destino, hasta que no pueda dejar de pensar en lo que nunca paso. Si esto no funciona te quedarás con la mitad de mí y yo seré una paloma comiendo piojos, pero aun así amaré nuestra historia. 


Ser curiosa tambien funciona como defecto, 

Fiirma Carol 

Comentarios

Entradas populares