Flechas inteligentes
¿No ha leído
usted el libro de las flechas? Pues este no es el caso, solo sirve de ejemplo.
Lo que pasa es que aún no me decido, llevo siempre conmigo la necesidad de direccionar
los objetos a las situaciones para digerirlas mejor; el Mago no fue una flecha
porque una flecha nunca vuelve, a una flecha no se le ve otra vez a menos que
uno vaya hasta donde se ha estrellado.
Ninguna vez que he dicho que alguien
volverá me he equivocado, hay en mi ambición y algo que sé que he hecho muy
bien; por otro lado cuando algo acaba mal siempre me digo a mi misma que no hay
de que arrepentirme porque siempre fui yo misma y no hay nada que hubiera
podido cambiar. Las corazonadas se equivocan pues nosotros entendemos la señal
que nos conviene pero este tampoco es el caso. La sustancia es que sentada en
el asiento del copiloto y mientras me besaba la mano yo solo podía pensar: Solo
yo sé lo que he dado para que se me devuelva multiplicado por mil.
Eres tan inolvidable como te lo propones
https://www.youtube.com/watch?v=2hvwvyQyab4
Firma Carol
Comentarios
Publicar un comentario